Si tenemos que pensar en “chicos portada”
que pudieran aparecer en la de Vogue, probablemente éste no sería el nombre que
nos viniera a la cabeza, ya que anteriormente al gran Lebron James, actual
jugador de los Miami Heat (NBA), sólo habían aparecido dos hombres en la
portada George Clooney y Richard Gere.
Una de las críticas fue que se tachó la
portada de racialmente insensible, L.James fue el tercer hombre en salir en la
portada, pero fue el primer hombre afro-americano (término que tanto les gusta
a los norteamericanos).
Los
comentarios se basaban en la pose del jugador de la NBA con la cotizadísima modelo
Gisele Bündchen que recordaba a uno de los carteles de la película de King Kong,
con lo que según algunos de los críticos dejaba a Lebron como una “mala
bestia”, pero aquí no se quedan las críticas, la más destacada y probablemente
la peor, fue cuando la web de Watching
the Watchers comparó la portada realizada por Annie Leibovitz con un cartel
de reclutamiento americano durante la Primer Guerra Mundial titulado Destroy
This Mad Brute. (destruya a esta
bestia enfadada).
Por último otra de las críticas
fue por parte de Damion Thomas, profesor en la Universidad de Maryland, que
afirmó que la expresión de James reforzaba la visión de los negros como
delincuentes.
Lebron James intentó quitarle importancia al tema diciendo: “Todo lo que hago lo comentan, para bien o
para mal ¿A quién le importa lo que dicen? A mi no.”
Cada uno es libre de pensar lo que quiera de la portada, yo
personalmente siento devoción por Lebron James tanto dentro de la pista como
fuera y dudo que Lebron accediera a aparecer en cualquier portada si tuviera
tintes racistas la revista. Además no se debe olvidar que muchas veces se le ha
apodado a causa de su enorme complexión y de su fuerza y potencia en la pista
como “la bestia” con lo cual puede que simplemente fuera una representación de
ese apodo de forma simpática que como otras muchas veces pasa se ha sacado de contexto.
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