Anna Wintour de origen londinense, fue mundialmente conocida
gracias a la película el diablo se viste de Prada basada en el
libro que escribió Lauren Weisberger, ex ayudante de Wintour. A pesar de
que lo han negado constantemente tanto la escritora como Wintour se cree que la
protagonista del libro está basada en la directora de Vogue. Encima por
si los rumores no fueran suficientes, Wintour fue a la premiere de la película
vestida de Prada.
Wintour es a la vez admirada por su inmenso conocimiento de moda y
tendencias, temida por su carácter y personalidad. Y es que nos presentan a una
directora de la revista como una tirana que pide cosas casi imposibles y casi
sin tiempo.
Además se le atribuye el haber impuesto a la revista una imagen
elitista, se rumorea que ha obligado a famosos a cambiar de aspecto si
querían salir en su revista, uno de esos rumores es que le negó la portada a la
gran Oprah Winfrey hasta que bajara de peso.
Y por si todo esto fuera poco, por lo visto A. Wintour no se anda
con “chiquitas” si no quiere que alguien le entreviste o no quiere que alguien
salga en su revista intenta que nadie de su mundo coopere con ella.
Para ir terminando otro de esos rumores que en este caso no son
rumores sino hechos, es que, no solo se niega a poner publicidad en su revista
de protectoras de los derechos animales, sino que en la revista y en su forma
de vestir habitual anima a que la gente use pieles naturales, con lo que ha
conseguido ser odiada por los amantes y defensores de los animales y objeto de
agresiones por parte de activistas, además ha sido punto de mira en alguna de
las protestas de PETA.
Probablemente nunca sabremos lo que tiene en común el libro y
posterior película con la verdadera Anna Wintour, pero lo que no se puede negar
es que gracias a la película, a los rumores que circulan sobre ella y a su
propia imagen se ha convertido en toda una institución y en un vivo reflejo de
lo que quiere en su revista y en lo que no
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